Reunión familiar en casa de mi tete, otra reunión alrededor de la mesa.
No se en vuestras familias, pero en la nuestra, con la edad se pierde el poder de convicción y elección de menus. Hoy la elección era del Raúl, a comer garbanzos, el se refería a cocido, pero como no pidió bien su deseo al genio Manolita, el menú fueron garbanzos con chorizo.
Si hubiera pedido la Paula sería el pastel de patatas, la Ruth podría ser el calabacín rebozado con queso y jamón o tortilla de patatas.
Si mi madre me dejara seleccionar uno de sus platos sería una difícil elección, pero ganaría el conejo con espárragos, un plato impresionante y super sencillo.
Sofríes el conejo, le pones los espárragos verdes con el agua que tienen o pones un poquito, un poco de sal y canela, plato listo para servir. Os puedo asegurar que está buenísimo.
¡Para chuparse los dedos!
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